Último artículo publicado en Deia – Bizkaia Activa
Vicente Gutierrez
No soy muy amigo de las modas y en el ámbito de la gestión hay demasiadas. Una moda que está invadiendo la literatura empresarial es aquella que considera al fracaso como valor, de tal manera que, si antes se procuraban disimular los errores cometidos, ahora se resaltan para destacar la experiencia positiva que hayan podido aportar.
Ni sí, ni no. El fracaso es tan inherente al individuo como su afán por evitarlo. El fracaso es la expresión o el resultado de un error, un déficit, un despiste, una falta de atención, de prudencia, de planificación, de control, etc. Por tanto, que nadie me venda el fracaso como un éxito porque no lo compro.
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